google25bf64896cccb828.htlm Viajando al centro...de tu ser: Viaje a Egipto. El templo de Karnak.

6.11.08

Viaje a Egipto. El templo de Karnak.

El paseo de las esfinges te recibe y te saluda cuando te vas. Intentas imaginárte las cabezas de carnero con cuerpo de león en honor del dios Amón una detrás de otra durante 3 kilómetros, cuando la antiguaTebas (Luxor) estaba en su esplendor, poniendo en comunicación una vez al año dos mundos que funcionaban de forma independiente. La diosa madre Mut, salía desde el templo de Luxor hasta Karnak para visitar a su esposo Amón (helenización del nombre egipcio Amen). Era éste el momento en que el pueblo podía ver las estatuas de los dioses que adoraban. A continuación Mut y Amón, juntos, se encaminaban hacia el Nilo y navegando sobre sus aguas transcurrían una semana. La promesa de fertilidad que el río portaba en su seno se cumplía y la pareja volvía a Karnak. Llamarían a su hijo Jonsu y así se completaría la tríada tebana. Y con ella la esperanza de prosperidad para el resto del año traducido en la inundación de las orillas del Nilo dejando el precioso limo, que convertiría la tierra asolada en útero donde podrían crecer las semillas que quitarían el hambre a la población.

Karnak posee santuarios dedicados a cada uno de los miembros de la tríada y es el conjunto de culto religioso hoy conservado más antiguo del mundo. Se inició desde el centro y contribuyeron a él faraones desde la XI dinastía hasta la XIX.

El templo más grande de Egipto, más de cien hectáreas.

La arena conservó sus jeroglíficos, relieves, historias de batallas y dioses durante más de 1.000 años y esto hizo posible que hoy podamos contemplar esta maravilla del mundo antiguo, quizá precisamente porque no fue considerada tal. Hasta el siglo XIX no se supo lo que allí había y aún hoy se sigue excavando, lo que da una idea de su magnitud.

El primer pilón ya impresiona por su grandeza. El gran patio deja a ambos lados el templo de Seti II y el de Ramsés III, donde se guardaban las barcas sagradas que utilizaba la familia de dioses en sus viajes. El primero, a la izquierda, estaba formado por tres capillas dedicadas a Amón, Mut y Jonsu (centro, izquierda y derecha). El segundo sorprende por el pilón con dos colosos del faraón.

Se atravesa el segundo pilón con la cara ya desencajada de admiración, mirando costantemente hacia arriba, observando el coloso con la doble corona de Egipto que podría representar Pinodjem I y uno se encuentra en una sala hipóstila de ciento trenta y cuatro columnas con capiteles de 3,50 metros de diámetro, la mayor parte de estilo papiriforme cerrado. Por increíble que pueda parecer aún se ven restos del colorido utilizado para decorarlas, a pesar de estar a la intemperie. Se desata dentro del pequeñisimo ser humano que observa la grandiosidad de las columnas, una desenfrenada necesidad de hacer fotografías con la esperanza de no olvidar jamás lo que siente en esos momentos. Mientras tanto los relieves cuentan como el faraón hacía ofrendas al dios Amón y los muros exteriores como Seti I y Ramsés II lucharon en Palestina y Siria y se aprende como se desarrolló, según la versión ramésida, la batalla de Qadesh.
Esta batalla se verá representada diversas veces en la historia egipcia y como ocurre a menudo en estos casos, las versiones de las dos partes son diversas, aunque éstas son demasiado diversas. Ambas aseguran haber ganado la batalla. La única realidad demostrable con documentación escrita es que se firmó un tratado de paz, por lo que de alguna forma tienen razón las dos vertientes. Christian Jacq , egiptólogo y escritor de fama mundial, da su versión novelada y seguramente apasionante en “Ramses. Parte III. La Batalla de Qadesh”.

Antes de llegar al santuario se atravesan pilones, obeliscos dedicados a Tutmosis II y a la valiente y odiada reina Hatshepsut, que fue faraón sin ser hombre, el muro de los registros de Tutmosis III...allá donde se gire la cabeza se descubre una nueva preciosidad.
En el sanctasanctórum el faraón se encontraba con el dios Amón-Ra. Las columnas presentan una curiosa peculiaridad: la base es más estrecha del resto. Al tiempo de Tutmosis III se llamaba la sala de las fiestas, entendidas como los rituales de regeneración del faraón. Quedan trozos de pinturas de santos dibujados durante el periodo en que fue utilizada como iglesia cristiana.
Saliendo de una de las múltiples salas del templo uno se encuentra en un pequeño pasillo de piedra a la intemperie que conduce al lago sagrado. E intenta imaginarse a los sacerdotes que acudían a purificarse antes de dar comienzo a los ritos del templo y sobre todo al mismo faraón, solo, acercándose al líquido sagrado. Impone.


Para dulcificar la sensación de misterio, el viajero se encuentra con un escarabajo gigante que trae buena suerte si viene circundado tres veces en sentido contrario a las agujas del reloj.
De la misma forma que el escarabajo pelotero enmaraña su bola y la hace girar, el escarabajo representado en los jeroglíficos ayuda el sol a realizar su viaje diario.

“El más perfecto de los lugares”, Ipet-Sut, es mucho más de lo que aquí se ha contado y vale la pena descubrirlo.

www.phistoria.net/fotos-de-historia/Egipto/Templo-de-Karnak.html
es.wikipedia.org/wiki/Karnak
http://www.anticoegitto.net/
vistasatelite.blogspot.com/2008/06/templo-karnak.html
www.egiptologia.com/content/view/55/33/
http://www.aol.it/news/story/Hallan-la-presa-más-antigua-de-Egipto-junto-al-templo-de-Karnak-en-Luxor/2979424/index.html
es.geocities.com/sabela25/templo_karnak.htm
www.egiptologia.org/arte/templos/karnak_amon/

www.excavacionegipto.com/contexto_geografico/karnak.jsp.htm
actualidad.terra.es/ciencia/articulo/descubierto_karnak_enorme_muro_protegia_1529004.htm

***

No hay comentarios: